Ángela María Penagos

Editorial:

Los conflictos socioterritoriales evidencian una realidad que afrontan las comunidades y los territorios de manera sistemática a partir de un conjunto de intereses que en muchos casos se oponen. Es por ello que contar con mecanismos que permitan una gestión efectiva para su resolución, es importante para que sean transformadores de las realidades y dinámicas territoriales.

Citando el documento “Estrategias colaborativas para el abordaje de conflictos: espacios de diálogo en México, Perú́, Colombia y Guatemala” de Álvarez y Castillo, el enfoque transformador de los conflictos debe apuntar a un desarrollo más democrático e incluyente sobre los procesos y decisiones que generan los intereses opuestos, proporcionando condiciones para que los efectos del progreso puedan comprender a todos los actores de un territorio.

De acuerdo con esto, tal vez una primera aproximación en la definición de un conflicto socio- territorial puede ser entendido como una situación de tensión entre dos o más actores, de escalas locales, nacionales o transnacionales, que tienen intereses legítimos y contrarios sobre un territorio. Según Cespaz, los conflictos socio-territoriales “tienen una estrecha relación con elementos tensionantes como la concepción, uso, formas de tenencia y de propiedad del territorio”.

Reconociendo la importancia de abordar esta problemática en el marco conceptual del desarrollo con enfoque territorial, Rimisp, dentro de sus nuevas áreas temáticas de investigación, quiere profundizar en un mejor entendimiento de los conflictos socioterritoriales y proponer alternativas y mecanismos para que, a través de su gestión y resolución efectiva, se generen condiciones propicias para el desarrollo territorial.

Esto aún cobra más relevancia si se tiene en cuenta la creciente proliferación de conflictos en los territorios rurales latinoamericanos. Estas problemáticas se caracterizan por la entrada en disputa de varios intereses entre los que se encuentra el control de los recursos naturales, el uso del suelo, el tipo de actividades económicas, incluso disputas interculturales y de identidad, entre otros.

En un análisis reciente realizado por Cazzuffi y del Valle se encuentra que, en el caso colombiano, los territorios con mayor presencia de conflictos tienden a presentar mayor vulnerabilidad a eventos climáticos y presencia de la violencia. En Guatemala, los territorios con mayores conflictos tienen mayores niveles de desigualdad y en México, además de más vulnerabilidad a eventos climáticos, son los más pobres. Es así como de este estudio entonces se pueden afirmar que los territorios donde hay mayores niveles de desigualdad, para los 5 países analizados, hay presencia de conflictos socioterritoriales.

Ahora bien, avanzar en esta línea de trabajo se convierte en un derrotero importante en el marco del desarrollo territorial porque son espacios que, además de, presentar un conjunto de dinámicas propias que pueden ser positivas o no para su desarrollo, tienen multiplicidad de conflictos. El desempeño de estas dinámicas está circunscrito o delimitado por el tipo de conflictos presentes en el territorio y la capacidad de transformación está enmarcada en la posibilidad real de gestionar debidamente estos problemas. Para ello entonces, uno de los temas críticos en los que es ineludible ahondar, es en los aspectos que generan confianza y la creación de condiciones institucionales que faciliten las actuaciones. De esta forma, es necesario avanzar en acuerdos sostenibles en torno a los intereses que generan situaciones tensionantes, donde el diálogo entre los diversos actores, representa un elemento clave para llegar a ellos.

Así mismo, Rimisp viene incursionando en nuevas métricas que permiten evidenciar las voces de estos actores y la importancia de gestionar y resolver estos conflictos, sobre la base de generación de transformaciones a nivel territorial que cambien la cotidianidad y reduzcan las situaciones tensionantes. Estos dos aspectos son relevantes para lograr una mejor calidad de vida y, además, pueden evidenciar procesos de mayor inclusión de poblaciones como las mujeres, los jóvenes y los grupos étnicos

Bibliografía:

Álvarez, S. y Castillo, K., 2020. Estrategias colaborativas para el abordaje de conflictos: espacios de diálogo en México, Perú́, Colombia y Guatemala, serie documentos de trabajo N° 263. Rimisp Santiago Chile.

Cazzuffi, Ch. & Del Valle V. (2019), Características de los territorios con conflictos en Colombia, Guatemala, El Salvador, México y Perú, serie documento de trabajo N° 257 Rimisp, Santiago, Chile.

Cespaz (2012) Estado del arte sobre los conflictos interculturales socio-territoriales en Colombia